lunes, 17 de julio de 2017

Paseos al aire libre por Zaragoza

Hoy os cuento una pequeñísima excursión que hemos hecho este fin de semana con los peques (M* 3 años y L* 2 años) al Castillo de Cadrete, a 11 km de Zaragoza. Y digo pequeñísima por es corta de verdad. Consulto con frecuencia blogs sobre actividades para hacer con peques, y en ellos, lo que llaman pequeñas excursiones, para nosotros son travesías...Esto en realidad es un paseo, más que una excursión.

Se aparca el coche en Cadrete y desde la plaza del pueblo está señalizada la subida al castillo. El camino con niños no llega a durar ni 20 minutos.

Hay información en los carteles con código QR que permiten escuchar, en "la voz" de Abderraman III la historia del castillo.

El recinto superior del castillo de Cadrete puede visitarse librementete y al interior de la torre sólo se puede entrar con visitas guiadas.

Castillo de Cadrete (Zaragoza)




Puedes encontrar más información en esta publicación:
EL CASTILLO DE CADRETE. DEL ABANDONO A LA VISITA GUIADA.  (En papel) VV.AA., 2015

jueves, 8 de septiembre de 2016

Empieza el cole, empezamos nueva vida

Septiembre viene cargado de muchos cambios en la familia. La mayor, M* empieza el cole y el pequeño L*, ya se ha echo lo suficientemente grande como para que empiece pequeñas actividades. Y yo, retomo el deporte. Sin duda lo más importante este septiembre es el comienzo del cole de M*. Nuestros peques no han ido a la guardería, ni tenemos pensado que el peque vaya, así que comenzar el cole es toda una novedad para nosotros. 

Ayer conocimos a la profesora: S*, creo que estaba yo más nerviosa que la peque. Después de lo que nos costó decidir el cole, y de pasar nervios por si no tenía plaza, conocer a la persona que le va a acompañar en su crecimiento durante los próximos tres años no era una nimiedad. Sólo fue una entrevista de 15 minutos, a modo de tutoría, pero me sentí como que la conocía de toda la vida, me transmitió confianza. Cuando salí del cole, sentí que no nos habíamos equivocado, S* me causó muy buena impresión.

Durante el rato que estuvimos en clase con la profe, M* jugaba en el que va a ser su "mundo" a partir del jueves. Hablamos tanto de cosas prácticas del comienzo de curso como de otras relacionadas con la forma de ser de M*. Y sobre todo tuve la oportunidad de preguntarle y comentarle a S* todo lo que me inquietaba.

Me parece una buena idea que en el mes de junio nos dieran una encuesta, que ayer tenía que llevar rellenada, dónde nos preguntaban cosas sobre M*. Cosas importantes para que en el cole conozcan por ejemplo, si es alérgica o necesita cualquier medicamento, datos sobre su grado de autonomía, si va ya sola al baño, si come sola, etc. y otras cosas que profundizaban más en su personalidad.

Rellenando el formulario, tanto su padre como yo, nos dimos cuenta de lo dificil que es encontrar palabras para describir a tu hija, a una personita que adoras con todo tu corazón. Pensando pensando nos iban surgiendo cosas, pero hasta los "defectos" los convertíamos en virtudes y siempre una palabra precisaba de párrafos enteros para matizarla. Hasta los aspectos menos positivos los terminábamos convirtiendo en casi virtudes...

Esto me hace reflexionar sobre lo que cuesta ver las cosas malas de los hijos. Y lo difícil que será hacerlo bien cuando M* se equivoque y tengamos que ver, no sola las virtudes, sino también los defectos. Y es que sospecho, que los padres siempre tendemos a ver a nuestros hijos perfectos y tendremos que aprender a ver los errores para poderles ayudar a corregirlos. Es importante ver los defectos de nuestros hijos para poder ayudarles...otro reto más en la vida.

miércoles, 31 de agosto de 2016

De ideas fijas...

Ayer 30 de agosto, nos preparábamos para ir al parque, y M* como hace con cierta frecuencia se quería poner unos zapatos de invierno.

Yo, cansada de repetirle hasta la saciedad, que no, que en verano se llevan sandalias y que si se ponía los zapatos de invierno te harían daño, dejé finalmente que se pusiera lo que quisiera
Toda la tarde corriendo con su prima. Llegamos a casa cena, ducha y a dormir. Todo normal.
Fué al día siguiente, cuando a mí ya se me había olvidado lo de los zapatos, cuando vi que cojeaba un montón (por cierto, esa tarde se puso las sandalias de verano sin protestar), y le pregunté: -- ¿Qué te pasa Martina?, Nada --contestó. Pero insistí y su cara me lo dijo todo...llevabas una buena rozadura en el pie... Durante unos días llevó rozaduras en los pies, pero ya te puedo asegurar que desde ese día no ha vuelto a ponerse los zapatos que no correspondían.

jueves, 25 de agosto de 2016

Una decisión importante: elegir colegio

En el mes de abril tuvimos que tomar una decisión muy importante. Elegir colegio para M*. Yo tenía claro qué tipo de colegio quería, pero por lo que me contaban familiares, amigos y conocidos que ya habían pasado por el mismo trance, intuía que iba a ser una decisión difícil. O para ser correctos, más que una decisión difícil, un “sorteo” difícil. Y aquí está el problema, que tú puedes tener claro a qué colegio quieres que vayan tus hijos, y luego la Administración, o la “fortuna” decide por ti.  

La zona en la que vivimos es una de las de mayor crecimiento demográfico en España, tanto es así, que si en la ciudad el número de niños a escolarizar ha disminuido, en nuestra zona faltan por lo menos 3 colegios. Otro ejemplo es el del centro de salud, los pediatras no dan abasto y sus consultas están saturadas todos los días. 

Pero eso es otro tema, volvamos a los coles. En este barrio, los colegios públicos brillan por su ausencia y los concertados no existen porque los políticos impiden que otras instituciones interesadas los construyan, es decir, hacen como el perro del hortelano, que ni come ni deja comer, y a la hora de la verdad, el problema y la preocupación se tralada a los padres. Debes elegir un cole teniendo en cuenta, no solo si te gusta o no sino también las posibilidades de que tenga plaza o no. Que entre o no en la primera opción y además calcular que si no entra en el primer cole de una lista de seis, es mejor que en la segunda opción pongas uno poco solicitado, aunque no te guste tanto como otros, porque si no es probable que no entres en ninguno se los seis.

Estarás pensando que eso no puede ser, que si no entra en el primero, ya entrará en el segundo. Pues no, creedme, la asignación de colegios es algo tan complejo que no me atrevo a describirlo en este post. Si os interesa el tema leed la normativa, eso sí, teniendo en cuenta que los varemos, puntos, criterios de selección pueden cambiar de un año para otro.

Por si dentro de unos meses estáis en el proceso de escolarización de vuestros peques, os dejo el enlace a una página donde podéis ver cuántas plazas ofertaron cada uno de los colegios para el curso 2016/2017 y cuantas solicitudes tuvieron. Podréis calcular cuántos niños quedaron sin plaza.

Hay gente que te dice que a la hora de elegir, era fundamental hacer números y calcular probabilidades de entrar en un cole o en otro. Pero claro si te fijas en esto, no puedes fijarte en lo que a nosotros nos parecía más importante: el proyecto educativo, las instalaciones, los servicios, la cercanía, los horarios, el nivel académico o el ideario del colegio, entre otras cosas.  

Y desgraciadamente tienen razón, hay que calcular “probabilidades”, pero nosotros después de visitar un montón de coles (os lo recomiendo) elegimos teniendo en cuenta estrictamente los criterios lógicos y pasamos de probabilidades de entrar o no entrar. Nos la jugamos...

El final de esta historia ha sido feliz. A M* le tocó una plaza en el colegio que pusimos como primera opción. Ya estamos preparando la mochila dentro de unos días la familia comienza una nueva etapa.

martes, 23 de agosto de 2016

No te veía hijo, menudo susto me has dado...

Buenos días familia.

Desde que soy madre, una de las cosas que más miedo me da es llegar a perder a "Princesita" o "Chiquitín" en algún lugar abarrotado de gente. Darse la vuelta y no saber dónde están debe ser una sensación horrible.

De hecho, ya tuvimos un pequeño susto cuando "Princesita" a penas tenía algo más de un año, una mañana, en una cafeteria muy grande, dónde íbamos habitualmente. Tan sólo estábamos nosotros y dos chicas, con una niña pequeña. De repente había “Princesita” desaparecido....Nos pusimos a buscar, sin alarmarnos mucho, porque no podia haberse ido muy lejo, pero sería incapaz de saber cuantos minutos, estuvimos buscando, quizá fueron tan solo segundos, pero el mundo se para, y la sensación de indefensión e impotencia es indescriptible. Al final, las chicas que estaban al fondo habían puesto dibujos a su pequeña y "Princesita" se había unido a la diversión (aún no entendemos "Papi" y yo es como no nos dijeron nada aquellas chicas cuando nos vieron buscar)....

No se sí fue a raíz de esa experiencia, pero cuando "Chiquitín" ya estaba de camino no paraba de darle vueltas a cómo me manejaría con los "Princesita" tan pequeña y "Chiquitin" recién nacido, en sitios desconocidos y con aglomeración de gente. A falta de unos meses de que naciera el peque, compramos esta correa, que como si sacaras a pasear a un perrito, permite llevar a la peque sujeta de la muñeca a un metro de distancia. La verdad es que a penas la usamos, a mi no me gustaba nada, y menos todavía, cuando "Miniyo" jugando no paraba de decir "guau, guau"... (ella se lo pasaba en grande), pero yo me sentía mirada y observada. Y a la hora de la verdad, cuando "Miniyo" veía algún punto de interés y quería ir hacia él, no había correa que se lo impidiera...

Este verano hemos ido a la playa, y les hemos comprado unas pulseras identificativas. Nostros las compramos en la farmacia, pero en internet también se pueden comprar todo tipo de modelos. Nosotros escribimos el nombre y apellidos de los peques y nuestro número de teléfono.
Afortunadamente no fueron necesarias, pero aunque no haya sido en primera persona, sí que este verano, y en dos ocasiones, he experimentado la empatía que se puede establecer con unos padres que no encuentrar a su niños.

Las dos veces en la playa, una en el Mediterraneo y otra en una playa en el Catábrico. En la primera ocasión había bastante gente, pero en la segunda la playa no estaba abarrotada de gente. Da igual, en ambos casos nos pusimos a buscar, sin saber muy bien a como era el cuerpecito de la personita que buscábamos.

Es curioso, pero cuando encontramos a las pequeñas, en ambas ocasiones, no se parecía nada en absoluto la imagen mental que me había hecho con la descripción de los padres, a las verdaderas niñás.

Al encontrarlas descansas, y la segunda vez, yo incluso me eche a llorar. No conocía de nada a las peques ni a sus papis, pero ver por un segundo la cara de sufrimiento de los padres es sufuciente para imaginarte el mal momento estaban pasando. 

Aquí os dejo algunos consejos prácticos para no perder a los peques:

  • Vístelos con ropas llamativas, al menos una de las prendas. Si vas con varios niños, lo ideal es que vayan vestidos con los mismos colores, así te resultará más fácil localizarlos.
  • Cuando estés sentado, delimita claramente la zona de juegos y explícales que no deben salir nunca de ella sin tu permiso. Utiliza límites físicos para que el niño lo entienda mejor (no salgas de la arena, o de las baldosas de este color).
  • Elige un silbido especial para tu familia con una tonadilla propia que nadie use. Si el niño se extravía en los pasillos de un supermercado te ayudará a localizarlo rápidamente si está cerca y escucha el silbido. Puede er más útil que gritar su nombre.
  • Si en algún momento se despista y pierde de vista a sus padres, el niño debe saber qué hacer. Enséñale a pedir ayuda sólo a las personas adecuadas como policías uniformados o trabajadores del centro comercial o bar en donde estabais. Que hable con ellos y les diga el nombre de sus padres para que los busquen.
  • Si estás en un lugar especialmente concurrido es recomendable ponerle una pegatina en la ropa con el número del móvil de sus padres. Puedes llevar unas cuantas en el bolso o la cartera para estos casos. Si no tienes ninguna escribe tu número en un papel y mételo en su bolsillo o escríbeselo en algun sitio visible de su cuerpo como el brazo o la mano.
  • Cuando llegues a un sitio concurrido saca tu móvil y hazle una foto al niño. No tardas nada y tendrás una imagen con la ropa y aspecto que tiene por si se pierde. Si no le puedes hacer una foto memoriza bien la ropa que lleva el niño para explicarlo a la policía si hace falta.
  • Define un punto de encuentro y enséñale a dirigirse a él si se pierde. Defínelo nada más llegar y que sea siempre el mismo para los lugares que frecuentas (el tobogán rojo del parque, la estantería de las galletas del super…). Expiica al niño que si se pierde y no sabe el punto de encuentro, lo que debe hacer es quedarse quieto y no moverse de donde está. Si intenta buscarte podría alejarse aún más y empeorar el problema.
  • La más importante de todas. Que nunca, nunca, nunca se vaya con un extraño ni se monte en el coche de nadie. Sea quien sea esa persona y por muy amigable que parezca. Que no se deje convencer por ningún extraño para abandonar el sitio en donde os está esperando.
  • Si pierdes al niño de vista, no te dejes llevar por el pánico. Mantén la calma y búscalo sin alejarte mucho de donde estabas (tu hijo podría buscarte ahí). Si pasados un rato no lo encuentras avisa a la policía de inmediato. Es mejor una falsa alarma que perder un tiempo valioso en su búsqueda.+ info

 

lunes, 18 de julio de 2016

Paseando por Bujaruelo (Huesca)

El otro día decidimos hacer una excusión desde el Valle de Tena, a donde solemos ir con mucha frecuencia, al Valle de Ordesa. Nuestra intención era subir a la pradera y dar un pequeño paseo por las famosas cascadas. Pocos paseos son tan gratificantes. Sin embargo, en pleno mes de julio, como es lógico, el acceso a la Pradera está regulado, y si quieres acceder, lo tienes que hacer a través de un bus. 

No nos apetecio coger el autobus, y decidimos cambiar de planes. Nos fuimos a Bujaruelo. Sin duda, una gran idea. Hicimos la Ruta Ornitológica del Valle de Bujaruelo, un camino muy muy sencillo. M* tiene 3 años y L* 1, nosotros no somos expertos montañeros, así que ya os podéis imaginar lo fácil que es el paseo.
  • ¿Por qué le gusta a los peques?: pueden bañarse en el río, pueden jugar en las campas sin peligro, tienen que cruzar puentes y ven un montón de peces,...
  • ¿Por qué les gusta a los papis?: facil acceso en coche, no hay peligros añadidos a los que de por sí tiene la montaña, hay árboles para comer a la sombra y echarse la siesta (menuda se echaron los chicos de la casa), cuando se termina puedes echarte un cafecito/cañita en el camping,...